Los cuadros de Jheronimus Van Aken, más conocido por el nombre que heredó de su ciudad natal, Hertogenbosch, siguen causando un profundo estupor y un sentimiento casi inefable al ser observados.
¿Qué pasaba por su cabeza? no dejamos de repetirnos. Desde luego, su faceta de visionario compite con la de loco atormentado. Sin otro estímulo para su imaginación que las imágenes provenientes de la Biblia y el acervo popular, El Bosco, irrumpe en la historia del arte con motivos infernales y criaturas dignas de la ciencia ficción/terror más actual y realista. (Walskium Magazine)
Se puede realizar un tour interactivo (en idioma inglés y holandés) por la obra y también ver el documental en español. Una experiencia reveladora.